Cómo nos alimentamos tiene un gran impacto en la salud de nuestro cuerpo. Aquí, los elementos imprescindibles para una dieta equilibrada.
- Frutos secos: una cucharada sopera diaria de frutos secos (nueces, almendras, avellanas, castañas, pistachos) es muy recomendable, puesto que son una gran fuente de minerales, vitaminas, grasas saludables, proteína vegetal y fibra.
- Legumbres: garbanzos, arvejas, lentejas, habas, habichuelas… son todas legumbres ricas en zinc, selenio y cobre, y algunas, como la soja, en isoflavonas. Se aconseja consumir un plato de legumbres cocidas tres veces por semana.
- Pan, cereales y papas: los cereales como el trigo, el arroz, el maíz, etc., contienen vitamina E y zinc. Una porción diaria de este tipo de alimentos es recomendable.
- Aceite de oliva: conviene tomar 1 a 2 cucharadas por día de este delicioso condimento cuyos ácidos grasos contribuyen a eliminar el colesterol malo.
- Carnes y pescados: es recomendable incluir dos porciones semanales de pescado, pollo o cerdo magro en nuestra dieta, así como una porción de carne roja.
- Frutas, verduras y hortalizas: contienen, básicamente, todos los nutrientes que el cuerpo necesita. La dosis recomendada es de 3 porciones de fruta por día, y 2 de verduras u hortalizas.
- Cacao: posee un gran contenido de varios tipos de flavonoides, por lo que conviene incluir este delicioso alimento en la dieta cotidiana. Se recomienda ingerir 25 gramos de chocolate amargo tres veces por semana.